viernes, octubre 21, 2005

Hipocresía
Es tan molesto ver la banalidad de los demás, y todos estamos perdidos al ser seguidores de luchas inútiles que nos llevarán, todas, a la perdición de nuestra esencia.
La hipocresía destruye la magia que poseemos, ¿por qué decir cosas que no sentimos? de nada sirve aparentar cualidades inexistentes y apoyar movimientos en los que no creemos.
Es exitante el sabor de la propia vida, de las creencias que tú te inventas, de las verdades que nos lastiman y de las aventuras a las que nos lanzamos cuando de casualidad nos topamos con ellas.
Pocas cosas son reales en el mundo, lo que sientes, lo que piensas, lo que crees y lo que sueñas, lo demás es parte del misterio que nos rodea.
Podemos sobrevivir entre las sombras, entre el silencio y entre el vacío siempre y cuando no dejemos de brillar con luz propia como la luna, mientras hablemos y mientras seamos capaces de sentir intensamente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La Luna no brilla por luz propia, al contrario, como todo lo que implica el toque femenino necesita del algo masculino para salvaguardar un poco sus intereses.
La Luna brilla a través del Sol.