lunes, abril 30, 2007

He deseado
He deseado que la locura se apodere de mí para desahogar el río de mis efusivos instintos, perderme tal vez en el paraíso de los excesos y ver el cielo, sin enternderlo, sin razonarlo, sólo verlo.
He deseado que el amor que aún te tengo se desvanezca en la sequía que tienen tus rechazos de siempre y de nunca.
He deseado que la lluvia te arrastre lejos de mí, que te lleve a donde no he ido, a donde nunca te encuentre, donde no huela a ti, ahí donde estás más lejos que ahora, donde el tiempo irremediablemente no te lleve a mí, donde todo tenga un fin... eterno, donde no estás ahora que deberías estar.
He deseado que las noches no sepan a ti, que no te iluminen, que cuando te quiera más no me lo recuerden la oscuridad y la soledad, que no me descontrolen las ansias y la necesidad de ir hacia ti, a admirarte desde un rincón donde no lo notes, donde no me notes a mí.
Y sigo deseando que te enamores de mí, que me recuerdes a mí, que el alcohol te sepa a mí, que me extrañes a mí... y que nunca me encuentres a mí.